miércoles, 27 de junio de 2012

Mercados, ¿cuál está barato, cuál está caro?

Continúan los tiempos turbulentos y difíciles en los mercados financieros. La volatilidad no cede, el nerviosismo tampoco y lo inversores se encuentran desconcertados, confundidos.

Con las grandes bajas acumuladas en una amplia gama de mercados bursátiles, todo parece ser una "gran oportunidad" de compra, con valuaciones atractivas que no pueden dejarse pasar para quienes apuestan a inversiones de largo plazo.

Esta última afrimación es parcialmente verdadera. Por un lado, es cierto que muchos activos financieros han sido fuertemente castigados aún cuando sus fundamentos económicos permanecen sólidos, por lo que serían las "perlitas" a detectar. Por el otro, muchas activos que han sufrido un profundo sell-off continúan con sus debilidades permanecen intactas y podrían seguir con su tendencia bajista.

Con la economía estadounidense creciendo a un ritmo anualizado por debajo del 2%, con la Unión Europea decidiendo su continuidad en las próximas semanas y con las economías emergentes en constante desaceleración, no es irracional que los inversores alimenten sus perspectivas negativas para la segunda mitad del año.

¿Será realmente así? ¿Habrá lugar para distinguir entre activos de buena calidad y los denominados "basura"? ¿Estamos en condiciones de tomar riesgos adicionales?

Algunos números que pueden ayudar a tomar decisiones...

Sin duda durante las actuales turbulencias los activos estadounideses han actuado como gran refugio para las inversiones, no solo en lo referente al dólar per sé o los bonos del Tesoro de ese país, sino también en lo que se refiere al mercado accionario.

Tras un año 2011 poco alentador para la renta variable, los mercados de acciones de Wall Street concluyeron con rendimientos prácticamente "flat" en contraste con las fuertes caídas evidenciadas en otros mercados.

En lo que va del 2012, la historia parece repetirse. Mientras que el S&P 500 gana 4,96% y el Nasdaq 9,55%, el FTSE de Inglaterra retrocede 7,9%, el IBEX español 23,1% y el Bovespa brasilero 5,1%.

La gran incógnita a develar es si esta situación se puede extrapolar para el próximo semestre o si el premio que ofrecen algunos mercados es extraordinariamente elevado como para comenzar a tomar riesgos.

Una aproximación a lo anterior nos puede dar el indicador P/E. Las acciones estadounidenses cotizan con un P/E promedio de 14x, lo que significa un 19% más que sus pares europeas y un 25% más que los mercados BRIC (Brasil, Rusia, India y China).

Esto nos deja como enseñanza que los inversores globales están dispuestos a pagar un premio en las acciones estadounidenses por sobre las europeas y emergentes con tal de descansar sobre la "tranquilidad". ¿Hasta cuando estarán dispuestos a pagar este sobreprecio?

Veamos el siguiente cuadro:


Considerando la información en el cuadro adjunto, surgen algunas cuestiones reveladoras:
  • Dentro de los mercados desarrollados, el mercado de Dinamarca y el de Suiza son los que más caros se presentan, con ratios P/E 17,7x y 15,9x respectivamente.
  • En el contexto de mercados emergentes, pero con un grado de desarrollo importante, Filipinas y Chile son los más sobrevaluados, con un P/E de 19,3x y 17,8x.
  • Finalmente, dentro de los mercados emergentes los de Malasia, Taiwán y Perú son los que mayor valores de P/E presentan.  
¿Cuáles son los mercados más "baratos" medidos por su relación precio / ganancia?
 
Rusia, Venezuela y Argentina.  
 
No podría llamarnos la atención esto último, debido al gran riesgo polìtico inherente en estos mercados y la inestabilidad creciente en economías fuertemente intervenidas por el Gobierno de turno.
 
¿Será el momento, entonces, de cerrar los ojos y apostar un pleno en estos mercados? 
 
El tiempo dará su verdicto...

 

sábado, 16 de junio de 2012

El repaso a mis apuestas especulativas

El 1° de enero publiqué en este sitio un artículo que se denominaba Mis tres apuestas especulativas para el 2012, las cuales se trataban de acciones que habían sido fuertemente golpeadas durante el 2011 y que, debido a su "pequeña" valuación de mercado, podían ser objeto de un "takeover" por parte de otras empresas.

Las tres acciones en cuestión eran Yahoo! (YHOO), Research in Motion (RIMM) y Netflix (NFLX), tres empresas que operan en sectores diferentes, con trayectorias relativamente distintas, pero con similitudes en lo respectivo a su posicionamiento de mercado dentro de cada uno de sus rubros.

Pasado prácticamente la mitad del año, el cual ha sido realmente muy dificultoso para los inversores a raíz de los múltiples frentes de combate abiertos alrededor del mundo, echemos un vistazo a ver cómo se han comportado estas tres apuestas.

En líneas generales, lo que podemos argumentar es que estás compañías han acompañado en cierta medida el ciclo de los mercados, aunque, debido a sus propias características, sus comportamientos han sido mucho más volátiles.

A excepción de Yahoo, tanto RIMM como Netflix han acompañado la tendencia alcista del primer trimestre con ganancias acumuladas de hasta 20% y 80% respectivamente, situación que permitió al inversor que ha tenido un buen timing disfrutar de ganancias poco despreciables en muy corto plazo.

Con la baja de los mercados, tras el agudizamiento de la crisis europea, las tres recomendaciones rápidamente retrotrajeron sus buenas performances y hoy se encuentran nuevamente en zona negativa, siendo la productora de Blackberry la más golpeada hasta el momento.


¿Cuál es mi postura para el segundo semestre respecto esta tres apuestas?

No ha variado. Sigo creyendo que cada una de las tres empresas tiene un atractivo para que inversores o grandes empresas se fijen en ellas.

Brevemente:
  • Yahoo! se desprendió de su unidad Alibabá, al tiempo que firmó un convenio con CNBC para enriquecer su sitio de Finanzas. Mejora la posición de liquidez y agrega lazos comerciales con empresas de mucha reputación. En el lado negativo, sigue perdiendo terreno frente a Google y Bing (buscador de Microsoft).
  • Reserach in Motion dejó definitivamente de lado la lucha por mayor participación de mercado con Apple y Samsung, situación que le es favorable para que se focalice en mercados emergentes con fuerte potencial, entre ellos India y Brasil.
  • Netflix ha desembarcado en el Reino Unido, mientras que el control y la penalización a sitio de streaming ilegales en Latinoamérica y los Estados Unidos le abre una puerta para posicionar su negocio en esos mercados.
Nunca debemos olvidar que son posiciones meramente especulativas y que por eso debemos considerar exponer un muy bajo porcentaje del portafolio a estas jugadas (no mayor al 5% del total).

Veremos como transcurren los acontecimientos en la segunda mitad del año.

PD: Para aquellos muy osados y amantes del riesgo, no se pierdan Nokia (NOK) y Green Mountain Coffee (GMCR), activos que prometen no pasar desapercibidos en los próximos meses.

jueves, 14 de junio de 2012

Acciones del sector energético argentino: una inversión con demasiado riesgo


Las empresas del sector energético argentino se encuentran al borde del colapso. Los inversores lo saben bien, desarman posiciones, y así, sus acciones se derrumban en Bolsa. Los analistas ya no confían en que el Gobierno autorice un aumento de las tarifas, uno de los motivos principales del presente de números rojos de estas compañías. Y aseguran que invertir en el sector es demasiado riesgoso, incluso en un horizonte temporal de mediano plazo.


En los últimos doce meses, los papeles de las eléctricas Central Puerto, Edenor, Endesa Costanera, Pampa Energía y Transener cayeron en promedio un 50% en la Bolsa porteña. Pero la situación que atraviesa, por ejemplo, Edenor- la mayor distribuidora de electricidad del país en términos de números de clientes y de electricidad vendida- se extiende también a muchas otras empresas prestadoras de servicios públicos, que fueron privatizadas en los ’90.


En el sector del gas, la semana pasada, Transportadora Gas del Norte –que opera en forma exclusiva los dos gasoductos que existen en las regiones norte y centro del país- solicitó su concurso preventivo de acreedores, que fue rechazado por la Justicia, y fue suspendida en Bolsa. En tanto, Metrogas permanece intervenida por el Gobierno desde junio de 2010, cuando entró en default. Y se especula con que el Estado tomará el control definitivo de la distribuidora de gas para evitar su quiebra.


En su pedido a la Justicia, TGN declaró que la falta de actualización de sus tarifas y los mayores costos derivaron en pérdidas operativas en los últimos cuatro trimestres, lo que tornó insostenible el plan de reestructuración de su deuda, pendiente de aprobación judicial desde octubre de 2009, tras alcanzar una aceptación de casi el 88% de sus acreedores. La empresa debe 347 millones de dólares, y desde diciembre de 2008 está intervenida por el Gobierno.


A su vez, el mismo día que TGN pedía su concurso, el lunes 4 de junio, las acciones de Edenor fueron las más perjudicadas en Bolsa: cayeron un 5,5%: los inversores temen por su elevada deuda en dólares y por las dificultades que tiene la compañía para cubrirse contra fluctuaciones del tipo de cambio. Edenor pertenece al grupo Pampa Energía, que perdió 71,4 millones de pesos argentinos en el primer trimestre del año. En el mismo periodo, Edenor sufrió pérdidas aún mayores: 90,60 millones de pesos, un 80% más que en el primer trimestre de 2011.


El viernes pasado, la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's bajó su calificación de CCC+ a CCC, argumentando que se prevé que continúe el pobre desempeño financiero de la compañía en la segunda mitad del año, por "los actuales altos riesgos políticos y regulatorios y la falta de ajustes de tarifas". Por el mercado corre el rumor de que Edenor podría ser la próxima compañía expropiada por el Gobierno, tras el caso de la petrolera YPF.


También está el caso de Transener, la mayor transportadora del país de energía eléctrica de alta tensión. Standard & Poor's redujo a B- la calificación de su deuda. Y este año, la compañía pidió una medida cautelar para que el Estado le pague una deuda de 100 millones de pesos. Un 25% del capital de Transener pertenece a Pampa Energía.


En el sector, los tapones están a punto de saltar. "Si no aparece la plata de los sueldos, el lunes hay paro en Edesur y Edenor", dijo ayer desde su cuenta personal en Twitter, Oscar Lescano, jefe del sindicato Luz y Fuerza. Citando al sindicalista, el diario Clarín había publicado que Edenor y Edesur tendrían problemas en julio para pagar los sueldos.


Un sector con perspectivas de mayor deterioro


Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global, es categórico. “El sector de servicios públicos no reviste ningún atractivo en el corto plazo ni en el mediano plazo”, dispara. El experto no ve intenciones de cambio por parte del Gobierno en la aplicación de medidas y políticas hacia el sector, ya sea tarifas públicas o incentivos para invertir.


Según Martínez, “viendo lo que ocurrió con YPF, creo que de surgir un nuevo problema energético, las empresas serán el chivo expiatorio del Gobierno y podrían ser víctimas de nuevas expropiaciones”.


El responsable del área de Research de Puente, Leonardo Bazzi, apunta que “Edenor probablemente podría tener problemas para pagar su deuda en dólares y para el pago de salarios. En el mercado existe el rumor de que el Estado tome mayor control de CAMMESA (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima), con lo que la empresa sería beneficiada”.


Según Bazzi, “la situación en algunos casos es delicada a nivel financiero y se va a mantener la volatilidad en este tipo de acciones. Pero muchos creen que el Gobierno va a intervenir para asegurar que el servicio no sea afectado”.


La visión de Andrés Cardenal, analista CFA Charterholder, es similar: “En el caso de Edenor, la empresa sigue perdiendo dinero y tiene una situación financiera comprometida; si no se le da un aumento de tarifas, tarde o temprano terminará quebrada”. Este experto también cree que probablemente, la compañía entrará en default y el Gobierno se hará cargo de la empresa mediante negociaciones con los acreedores.


El economista jefe de Inversor Global agrega que “estas compañías están en zona de pérdida operativa, con costos crecientes y precios congelados de sus ventas, mostrando una dinámica peligrosa. Además, tienen deuda en dólares, con lo que implica hoy tener pasivos dolarizados en un contexto de complicaciones en el sistema cambiario argentino. La depreciación del dólar le genera pérdidas financieras”. Andrés Cardenal redondea el pronóstico negativo, diciendo que “con los números al rojo vivo es muy poco probable que la empresa invierta, entonces es complicado compararlas con otras compañías de la región. El tema de las tarifas no solo impacta en la rentabilidad actual del negocio, afecta también a las inversiones de la empresa y, por lo tanto, su capacidad de operar eficientemente en el futuro”.


En Puente creen que el sector tiene una visión muy estable: “no esperamos cambios y no vemos valor en el corto plazo: la situación financiera no es saludable; al sector le llevará algunos años volver a ser rentable”. El jefe del área de Research de esta firma asegura que “las perspectivas son de un mayor deterioro en el futuro. Podría haber canje de deuda o reestructuración de la misma. Vemos valor en el largo plazo, en caso que la deuda se reestructure y se desregulen las tarifas”.


Diego Martínez Burzaco concluye: “no veo atractivos o drivers para invertir en el sector energético argentino. Las acciones argentinas, en general, remiten un alto riesgo, pero de elegir una apuesta especulativa, seguramente no lo haría ni en Pampa Energía, ni en Edenor ni en TGN”.